Eliseo Santana A.
Patadas en la entrepierna, burlas y humillaciones fue lo único que recibieron los leonelista en la lucha por posiciones dentro de morena, una competencia valida entre “compañeros” de partido que se disputan posiciones, en teoría “En buena lid”. Los dados cargados, las “encuestas” compradas, los tratos rotos, la prepotencia, petulancia y una puta arrogancia que ofendía a sus iguales que los veían como morenos de tercera o, ¿Será de cuarta? , esto, provocó la desbandada, Víctor se fue quedando solo… bueno no tan solo, quedó rodeado de sus corifeos, sus bufones preferidos que le sugieren chascarrillos de mal gusto para que los cuente, y que cuando pregunta ¿Qué horas son? le contestan “Las que usted diga señor”.
Se desgranó la mazorca, y ahora los candidatos de morena
andan muy por debajo en las preferencia ciudadana, tarde se dan cuenta que los
que corrieron, SÍ CUENTAN, ¿y, Leonel? … Leonel no tuvo que hacer nada, “Eso es
lo que hizo”.
Los leonelistas saben que si apoyan de última hora a los
puchistas, los volverán a traicionar, LOS PUCHISTAS los quieren en el suelo, boca bajo, callados, sumisos,
y la verdad no creo que sean de “esos”.
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