BALCONEANDO
Por Alejandro Barañano
Tal parece que hay quienes no entienden que criticar lo actual no te
hace cómplice de lo anterior, como haber criticado lo anterior tampoco te hace
partidario de lo actual. Ser inconforme con el pasado y con el presente no
te hace ni “chairo” ni “fifi”, te hace un ciudadano
pensante y responsable, necesario para una sociedad desarrollada que lucha
constantemente por mantener sus libertades y derechos.
Pero lo que si provoca desazón, repulsión e incluso náusea es la manera
tan irracional, insensata y hasta repugnante por el modo de actuar de los
diputados que conforman la bancada del Movimiento de Regeneración Nacional en
el Congreso del Estado –tantos hombres
como mujeres- pues sin sustento
alguno no dejan de atacar a los que siguen ejerciendo su derecho a la crítica,
a los que aspiran a un gobierno de calidad -o
cuando menos acotado y responsable- lo
que los convierte por obviedad el legisladores “chairos”, o sea, en una especie de defensores a ultranza de
los políticos en turno, simples miembros de una manada, de una congregación que
venera a un pastor a cambio de un sentido de pertenencia y de una falsa
seguridad.
Lo digo porque la mujer que llegó a donde se encuentra por obra y
gracia divina y no porque esté realmente preparada para el cargo que ostenta,
María
Rosalba Rodríguez López, soltó
una arenga por demás atropellada que alguien le redactó para que lo leyera sin tan
siquiera recapacitar, atacando sin ton ni son a la Presidenta de la Mesa
Directiva del Periodo Legislativo que recién comienza.
Quien se dice ser hacedora de
leyes, acusó sin sustento alguno –con pura palabrería “chaira”- que la diputada Daniela Rubio Avilés incurrió en reiteradas violaciones a la Ley Reglamentaria
del Poder Legislativo, esto al responder desde el sitio que ocupa las participaciones
de sus compañeros diputados sin inscribirse previamente, además de que aseguró
que lo hacía con ventaja por tener el micrófono, abusando y promoviendo las discusiones
en forma de diálogo prohibidas. ¿O
sea que para María Rosalba mientras Homero González Medrano mantuvo esa misma posición
no aplicó la misma dosis pero con sus peculiares dejos de altanería, egolatría
y soberbia que le caracteriza? ¡Qué poca
memoria demuestra tener la “doñita”!
Lo que lo pobre y mal informada diputada de Morena debería de saber es
que la ahora presidente del Congreso del Estado tiene amplias facultades para
conducir las sesiones y deliberaciones, y si no lo cree entonces que lea –o que se lo lean cuando menos- lo que se señala claramente en los artículos 40 y 41 de la Ley Reglamentaria.
Además, al igual que todos los
diputados, Daniela Rubio Avilés goza de la prerrogativa de que las opinión que
manifiesten en el desempeño de sus funciones, jamás podrán ser reconvenidas;
esto basado en lo que se establece el Artículo 33 de esa ley, pues antes de ser presidenta de la Mesa
Directiva es diputada con los mismos derechos y atribuciones de todos, lo que
la hace no ser un monigote de otros diputados como parece es el caso de la
legisladora “chaira”.
Tan es así, que no muestra capacidad alguna para darse cuenta que está
equivocada al creer que la presidenta de la Mesa Directiva solo debe de conceder
el uso de voz a sus homólogos como si fue una figura de adorno, y más aún no
poder hablar u opinar sobre el desarrollo de
las sesiones.
La creciente polarización en el Congreso del Estado está atrofiando definitivamente
la convivencia social, pues para los de la bancada de Morena o eres de la
mafia del poder sino eres simpatizante de la Cuarta Transformación; en
otras palabras, o eres “fifí” o eres “chairo”.
Los puntos de vista en ambos bandos son aniquilantes, provocan
linchamientos mediáticos, familiares y hasta laborales. El terror sistemático
produce obediencia silenciosa. ¿Qué
sigue o qué quieren que siga? La verdad no lo sé.
Muchos motivos tenemos los mexicanos para sentirnos frustrados por el grado
de desempleo que existe, la inseguridad galopante, la violencia sistemática en contra
de las mujeres, un desarrollo económico cero. Tal parece que los dioses del Olimpo
se confabulan para que vivamos feliz, feliz, feliz aunque el Instituto Nacional
de Estadística, Geografía e Informática tenga otros datos; por lo que mejor
quien esto escribe seguirá BALCONEANDO.
. .
No hay comentarios:
Publicar un comentario