BALCONEANDO
Por Alejandro Barañano
El pasado viernes se montó una puesta en escena en donde la alcaldesa Jesús Armida Castro Guzmán presumió los
principales ejes y compromisos que fijó desde hace un año atrás. Y digo que
fue simplemente una puesta en escena pues
se dedicó –aparte de mentir- a
presumir una serie de acciones tal y como lo son –según la mujer sinaloense- la
austeridad republicana y el combate a la corrupción.
Además, con total descaro y sin disimulo alguno, externó con esos aires
de diva que la caracterizan, que la democracia participativa es para ella un cimiento
rector, y que su mayor preocupación es mejorar el pésimo servicio de abasto
de agua potable y la recolección de basura; aunado a mejorar y ampliar la
cobertura de las políticas sociales para el bienestar; apoyar y estimular a los
emprendedores y a los productores rurales para así generar sus propios negocios;
planear un desarrollo urbano más ordenado y dar un mayor impulso a los derechos
humanos y garantizar una mejor protección y la tranquilidad a la ciudadanía. O sea, que pintó un mundo de colores la
polémica alcaldesa en su fastuosa obra teatral.
Por su fuera poco, la misma Jesús
Armida Castro Guzmán continuó diciendo que se maneja con suma honestidad y estricto
respeto, y que por ello las cosas empiezan a cambiar en la zona austral del
estado, insultando con tan absurdas frases la inteligencia de un pueblo que por
rebote creyó en ella aquel primero de julio del 2018.
Y si digo que insultó la inteligencia del pueblo cabeño es porque este
no olvida como el 15 de marzo pasado la Oficialía
Mayor del Ayuntamiento de Los Cabos lanzó una Licitación Pública Nacional
para arrendar un total de 172 vehículos, entre las que destacaban una GMC
Yukon con blindaje Nivel 3; cinco camionetas de lujo como era una Chevrolet
Suburban, una RAM 1500 SLT Crew Cab HD y
que es en la que actualmente circula de aquí para allá la repudiada alcaldesa,
esto claro gracias a los impuestos que pagan los habitantes.
Tampoco dijo nada sobre el contrato de arrendamiento que tuvo un costo superior
a los de 124 millones de pesos, mismos que están siendo pagados en “cómodos abonitos” de más de 3 millones
de pesos al mes –esto durante 30
meses de su administración- contados
a partir del mes de abril pasado, y mintiendo porque en su puesta en escena
declaró que las unidades en cuestión quedarían como parte del inventario del
Ayuntamiento de Los Cabos, lo cual según se consigna en el contrato oficial,
cuando en realidad se trata de un arrendamiento puro. ¡Quihubole!
Además los escándalos en la administración de Jesús Armida Castro Guzmán han sido el pan nuestro de cada día, tal
y como sucedió cuando se descubrió que su hijo David Dimas de oficio estudiante, el cual fue dado de alta como
empleado del Sistema Operador de Agua
Potable y Alcantarillado de Los Cabos, tan así, hasta que el peso de la
evidencia cayó sobre su persona cuando el ISSSTE confirmó que su retoño había
sido dado de alta como empleado formal y para comprobarlo se mostraron los registros
de su alta y baja, motivo por lo cual la entonces Directora de Finanzas de la
empresa paramunicipal tuvo que presentar su renuncia.
También en la fastuosa puesta en escena de Jesús Armida se le pasó decir que en marzo pasado las fuertes
diferencias entre la sinaloense y el entonces director del organismo, Ramón Ojeda Mestre, ocasionaron que se viera obligado a
presentar su renuncia y después ganar un amparo en primera instancia, dejando
mal pero muy mal parada a quien alguna vez se dedicó a ser animadora infantil
en su tierra natal.
Pero los escándalos al interior de
dicha dependencia se seguían dando uno tras, pues Daniel Ayala Beltrán, quien
asumió el cargo que ocupaba Ramón Ojeda
Mestre, no pudo hacer nada con el atiborrado
desaseo que se ha venido presentando la administración de Jesús Armida Castro Guzmán, por lo que también fue despedido
sin fórmula de juicio, esto justo al estallar el escándalo del “cachorro”
de la edil morenista.
Por si fuera poco, la misma alcaldesa tuvo la osadía de
manifestarse con respecto a la salvaguarda de los derechos humanos, pero
omitiendo –por supuesto- el evento aquel cuando agentes policiacos municipales
fueron usados para reprimir y arremeter en contra de la manifestación que
realizaba un grupo de personas en proceso de recuperación, zafarrancho que terminó
en la barandilla con varios detenidos, un amparo incumplido y una pifia más en el
gobierno municipal que encabeza Jesús
Armida Castro Guzmán.
Hablar de cifras, montos y otras linduras llevaría mucha tinta y mucho papel,
por lo que en conclusión diremos que la puesta en escena de la alcaldesa Jesús
Armida Castro Guzmán fue aburrida, disparatada, simulada, insidiosa y falsaría,
misma que la cual llevó por nombre: Primer Informe de Gobierno Municipal;
por lo que mejor quien esto escribe seguirá BALCONEANDO. . .
COMO EN BOTICA
El viernes pasado se presentó el
informe de labores por parte del secretario general del Comité Ejecutivo Sección
La Paz, MAURICIO HIGUERA COTA, y en
el evento se procedió a suspender los derechos sindicales de EDUARDO VALDEZ y del titular de la Secretaría de Finanzas, RUBÉN COTA COTA, situación que se
determinó por unanimidad por parte de la base trabajadora y como medida
cautelar ante la negativa de ambos personajes para presentarse a rendir
cuentas, situación que se estableció en lo que fue la SEGUNDA ASAMBLEA GENERAL ORDINARIA. . . Los innumerables tropiezos que
sigue cometiendo VÍCTOR MANUEL CASTRO
COSÍO -que son de todos los días y de
a cada rato- no auguran nada bueno para el proyecto que dice tener, tan así
que este fin de semana ya se comenzó barajear el nombre del plan B, HOMERO DAVIS CASTRO, como posible
abanderado a la gubernatura por MORENA esto bajo el aval de LEONEL EFRAÍN COTA MONTAÑO. . . ¡HE DICHO!
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