- La alimentación
balanceada y la activación física son determinantes para mejorar el
funcionamiento del indicó especialista en nutrición de la Secretaría de Salud
en BCS
La reducción de peso y el control de niveles corporales como
la glucosa o el colesterol son propósitos saludables de año nuevo que son
factibles de lograr en la medida que las personas inicien un cambio gradual y
decidido de hábitos de alimentación y de activación física, que puede apoyarse
en los servicios gratuitos otorgados por el Gobierno de BCS, a través de las
jurisdicciones sanitarias, centros de salud y hospitales estatales.
Así lo expresó la coordinadora del programa de Alimentación y
Activación Física de la Secretaría de Salud en el estado, Isabel Moreno de la
Peña al comentar que bajar el peso corporal es uno de los propósitos de año
nuevo que con mayor frecuencia se plantea la población, el cual es
completamente lograble al modificar pautas nutricionales, como la incorporación
de colaciones entre comidas y diversificar sus consumos, además de fijares
metas definidas, como es el número de kilos a perder.
La especialista en nutrición dijo que muchas personas
desisten de este propósito a lo largo del año por negarse a eliminar de manera
súbita y definitiva la ingesta de alimentos procesados o bebidas azucaradas,
pero comentó que para no perder la motivación es posible hacer estos cambios de
manera gradual, con el apoyo de especialistas que otorgan asesorías gratuitas
mediante los servicios que la Secretaría de Salud en BCS ha fortalecido con el
liderazgo del titular del ramo, Víctor George Flores.
Los pacientes que carecen de IMSS e ISSSTE, y los
beneficiarios del Seguro Popular, pueden acudir al centro de salud más cercano
a su vivienda para recibir consulta con el médico general y solicitar que sean
canalizados al servicio de nutrición, donde recibirán una propuesta alimenticia
accesible y adaptada a sus circunstancias físicas y de salud, con la intención
de que esta guía los ayude a mejorar el funcionamiento de su organismo mediante
una nutrición adecuada, comentó.
El sobrepeso, la obesidad, los altos niveles de azúcar en la
sangre, de colesterol o triglicéridos y la hipertensión arterial (que son
factores altamente riesgosos para la salud, porque pueden generar diabetes o
enfermedades renales, así como accidentes cerebrovascular como infartos y
derrames) reflejan en gran medida nuestros consumos diarios, de ahí la
importancia en hacer un esfuerzo por tener una mejor calidad de vida, dijo.
No solo es incorporar mayores frutas y verduras a la ingesta
diaria, sino reducir el consumo de sal y de azúcar, incrementar la ingesta de
agua, sustituir las grasas saturadas que proviene de la manteca por grasas
insaturadas como el aceite de oliva o cártamo, al puntualizar el llamado a las
personas para que se acerquen a las jurisdicciones sanitarias donde también hay
sesiones periódicas de activación física que ayudan a gastar las calorías
adquiridas mediante las comidas diarias.
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