Digo
Por Vic
Villavicencio
Con las
modificaciones que han tenido los mecanismos de aplicación de justicia, ahora
resulta de que para certificar un fallecimiento por cusa natural, ésta debe de
hacerlo la secretaría de salud y no el ministerio público, como sucedía antes.
Esto ha
ocasionado trastornos que afectan directamente a la ciudadanía. Ya han habido algunos casos en los que
familiares de fallecidos, han tenido que peregrinar por las oficinas
respectivas, solicitando el servicio y nadie sabe informar al respecto.
Todo esto,
tal vez, por falta de un acuerdo entre dependencias. O lo que resultaría más grave en plena era
digital: por falta de comunicación.
Digo.
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